Dramática situación laboral

Publicado en el diario “El Universal” de Caracas. Sábado 6 de septiembre de 2003

 

Si tuviéramos que seleccionar a un sector de la sociedad venezolana que ha sufrido con todo rigor las adversidades de los últimos tiempos, ese sería el laboral. Y no podría ser de otra forma, ya que en una economía donde se han producido las colosales contracciones de la producción de los últimos años, los primeros que padecen las consecuencias son los hombres y mujeres que pierden sus puestos de trabajo.  Es fácil imaginar las consecuencias que sobre los trabajadores ha tenido una caída cercana al 40% del PIB per cápita entre el último trimestre de 1998 y el primer trimestre de 2003, siendo los años 2002 y 2003 los más recesivos.  En efecto, en ese bienio se estima que el producto real por habitante experimentará una contracción del 23%.

Eso explica por qué el desempleo ha crecido desmedidamente, y el subempleo afecta a más del 52% de la fuerza laboral.  De hecho, más del 70% de la población activa está afectada por situación de desempleo abierto o subempleo, incluyéndose en este último grupo a la enorme masa poblacional que no consigue trabajo permanente, y que tan sólo percibe algún ingreso producto de sus actividades informales, como buhonería, servicios esporádicos, o elaboración casera y venta de productos de consumo.   El estimado oficial de la  tasa de desempleo del primer semestre de 2003, por su parte, superó el 19%, aunque varias empresas privadas que realizan estudios periódicos del mercado de trabajo estiman que ésta superó holgadamente el 20%, habiendo experimentado una franca tendencia al alza durante los últimos años.

No sólo eso, el salario real promedio de los trabajadores, es decir, el poder de compra de los salarios nominales que éstos perciben, también ha mostrado una contracción de importancia durante los últimos tiempos, revirtiéndose así la recuperación que mostró esa variable durante los primeros años de la actual administración.  Obviamente, mayor desempleo y subempleo, combinado con menores salarios reales no se traduce en otra cosa que en mayor pobreza, problema que hoy afecta a más del 70% de los hogares venezolanos.

Realmente, cuesta entender cómo altos voceros del gobierno consideran un logro el hecho de que la tasa oficial de desempleo disminuyó en julio a 18,3%.  Si de algo no se puede jactar ningún miembro de la actual administración es de la situación del sector laboral, la cual, sin temor a errar, puede catalogarse de dramática.

 

Imagen: elmundo.cr