La inflación en 2009

Publicado en el diario “El Nacional” de Caracas. Lunes 16 de febrero de 2009

 

La inflación de este año será elevada, y muy posiblemente supere con creces la del 2008. Sin embargo, a diferencia de la que hemos estado sufriendo en el pasado reciente, la de 2009 no se deberá a crecimientos acentuados de la demanda debido a la expansión monetaria producida por el desbocado gasto público, sino más bien a incrementos de los costos de producción y a restricciones de oferta.

La estrepitosa caída de los ingresos petroleros debido al desplome de los precios internacionales forzará al gobierno a restringir la asignación de divisas preferenciales para importar, dándole prioridad a las compras externas de productos básicos, como alimentos, medicinas, equipos, etc. Esto implica que el grueso de las importaciones pasarán a ser hechas con dólares más costosos, como los que se pueden adquirir en el mercado paralelo, o a un tipo de cambio controlado pero mucho mayor que el preferencial actual. En cualquiera de esos casos se produciría es una devaluación de facto, ya que aun cuando se decidiere mantener sin alteración la tasa oficial a Bs/$ 2,15, el tipo de cambio promedio al que se realizarían las transacciones externas sería mucho mayor que el del año precedente. Obviamente, esto implicará el encarecimiento de los productos foráneos.

La incertidumbre para los productores, importadores y distribuidores acerca de si continuarán o no recibiendo dólares preferenciales para sus importaciones y en qué cuantía, los forzará a establecer sus precios basados en los costos esperados de reposición, pues aun cuando un productor esté produciendo con materias primas que importó con dólares preferenciales, no establecerá el precio de su producto basado en ese costo, sino que lo hará siguiendo el criterio de que es imperativo obtener más bolívares por la venta de sus productos para poder adquirir los dólares más costosos, que requerirá para reponer su materia prima.

Las posibles restricciones a los volúmenes de importación limitarán la oferta de productos, contribuyendo ello a elevar los precios. Si a esto agregamos la mermada capacidad de respuesta del aparato productivo interno para incrementar sus niveles de producción, debido a los persistentes ataques y acosos de que es objeto a través de expropiaciones compulsivas de tierras productivas, cierre de operaciones periódicas, confiscación de mercancías por supuestos acaparamientos, y otras acciones, el lógico inferir que no será fácil substituir la menor oferta externa con productos locales, persistiendo así los problemas de escasez.

Otro factor que contribuirá a generar inflación es el desabastecimiento, que ha vuelto a aparecer cada vez con más fuerza. Los nuevos controles que acaban de ser anunciados contribuirán a ello. En efecto, según las nuevas normas, cualquier producto que se produzca con una materia prima que, a su vez, sea utilizada en la producción de un producto controlado, requerirá el permiso previo del Milco, quien no sólo determinará si se puede producir y en qué cantidades, sino que muy probablemente le fijará el precio al que pueda ser vendido.   Si bien se sabe que estos controles son muy ineficientes, los mismos se traducen en grandes trabas para la producción de los productos afectados, generando a larga problemas de desabastecimiento.

La posible implantación de nuevos impuestos indirectos, tal como el que pecha a las transacciones financieras, o la elevación de otros, como el IVA y los aranceles a las importaciones, también contribuirán a elevar los precios.

Sin embargo, el abaratamiento de los productos básicos debido a la crisis global, como cereales, azúcar y otras materias primas que importamos, mitigarán la inflación de este año, aunque parcialmente, siendo lógico esperar un repunte de ese flagelo con respecto a lo padecido en 2008.

 

Imagen: mendozapost.com